Bienvenid@s a mi blog de canalizaciones

viernes, 21 de junio de 2013

Canalización de las hadas

Desde tiempos ancestrales las hadas colaborábamos con la especie humana hasta la gran caída. A partir de entonces, sólo lo hicimos con unos pocos escogidos y con los niños de edades tempranas. En el bosque nosotras buscamos refugio y hogar, allí se halla nuestro cetro de energía. 

En las hojas de los árboles reposan historias de hadas que van a serte susurradas por la brisa matutina en la pradera, en las colinas, en el paseo verde o en el puente. Allá donde pises, una historia te será revelada, confiada, depositada para retornar a tu alma hadada, el lugar de donde partió. Así irás recuperando tu legado para fabularlo y adaptarlo a tu mundo actual. 

Grandes maestros se te acercarán y te guiarán pues ya debes dejar de perderte y orientarte hacia el destino que te pertenece. Recupera tu poder. Aún queda tiempo para que llegues a tu nueva destinación pues todavía deben consolidarse procesos y pasos necesarios, preparativos y detalles, gestiones, trámites y pequeñas victorias que te conducen a la toma de posesión de tu nuevo y amplio hogar. Allí los duendes y ángeles te esperan, celebran la vida todos los días y se recrean en su pureza. 

La vida te abre las puertas y crea numerosas sincronicidades para garantizar que llegues a buen puerto.

Relatadora de historias mágicas, leyendas, cuentos, reflexiones y demás saber espiritual, dibujas con  maestría recuperando tu destreza de antaño, recreando formas y colores de puro palpitar, de puro sentir, de puro amar, de pura iluminación. 

Vaporosa y ligera, te elevas en un halo de luz nacarada que se filtra en cada poro de tu piel y te muestra radiante y serena. Vuelas en meditación y permaneces en la dimensión hadada, donde recibes todo el amor de los tuyos, recuerdas y remembras. Te reunificas en una y traes este nivel de unidad a la Tierra con todos tus leales servidores de otra época que reaparecen en tu escenario para llevar a cabo la gran obra que os fue
encargada. 

Este fluir constante es respirado e imprimido en cada una de tus acciones, palabras, ilustraciones y gestos a un nivel evidente para aquellos que estén preparados para adquirir un mayor grado dimensional. De este modo, todos os nutrís, respetando y descartando a los que no precisen de este alimento espiritual., que va viajando encarnación tras encarnación  para reestructurar el alma y devolverla a su estado originario y puro. Allí regresarás y te reunirás con los tuyos, con tu verdadera familia, unida a ellos por lazos y vínculos
eternos de los que nadie conseguirá desligarte.

Algunos maestros del engaño te han dañado para aleccionarte pero otros muchos lo han hecho por el placer de dañar y su karma acumulado deberá aligerarse en reparaciones, compensaciones y reajustes de saldo kármico. Tú has ido ajustando el tuyo, aunque no siempre lo has comprendido, pero desde el momento que has aceptado los hechos, sin saberlo, has empezado a aligerar karma. Aceptar es liberarse, es rendirse, es entregarse. La aceptación no debes confundirla con sumisión, sometimiento o esclavizarse. Pero si en otras vidas tú has esclavizado, en ésta, otros te esclavizarán a ti, cuando te das cuenta y lo aceptas como una actitud interna, sin darte cuenta, cortas el poder de quien te esclaviza y acabará por dejar de hacerlo pues los medios que han permitido que te sometiera irán disolviéndose, como la bruma matinal lo hace ante los rayos del sol. Alégrate si antes fuiste negativa porque eso te conducirá a un positivismo en el que te acabarás destilando completamente en luz, en belleza angélica. 

En un rincón del bosque junto a un río tus guías te esperan anhelantes, ansiosos para acariciarte con sus historias y llevarte al país de las hadas, allá donde no existe la noción de tiempo, ni el dolor, ni el castigo pues todo o casi todo resulta en perfecta unidad y amor. De ahí partiste y allí regresarás triunfante para abrazar tu reino y fundirte con él. Volarás libre y hermosa con tus hermanas estrellas y con tus hermanas hadas y desde allí seguirás susurrando historias a los niños en sueños y en momentos álgidos de su existencia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario