Bienvenid@s a mi blog de canalizaciones

viernes, 24 de febrero de 2012

Canalización desde las estrellas doradas

En mi dimensión de estrellas doradas desarrollamos un estar individual en el ser que nos totaliza en la unidad de tal modo que nos sentimos en su centro estemos en compañía o no. Por tanto, cuando alguien pretende robarnos este estado del ser, nunca lo consigue pues estamos permanente y eternamente conectados a la plenitud y la dicha de la fuente que nos lo da todo. Estamos cerca de ella y debemos proteger nuestra visión para que no nos deslumbre y nos desborde por encima de nuestras posibilidades con el peligro de emborracharnos de locura. La sensatez, la templanza y la cautela nos vinculan a nuestra madre, la fuente creadora que nos vio nacer y que nos ampara con el cariño de una madre que cria a sus hijos en plena libertad, con desapego y amor incondicional desde el seno de la mente neutral que ha trascendido el juicio.

Vivimos con confianza y no nos es necesario cuestionar nada pues el ser no cuestiona ni etiqueta, simplemente sabe. Nos abrimos desde pequeños a nuestra inteligencia natural en la que vuelan los ángeles, esos seres de luz con quien compartimos charlas cerca del sol central en la calidez de las manos de Dios.

Gracias por canalizarnos y otorgarnos la oportunidad del diálogo cósmico al que te abres espontáneamente y que pasará a formar parte natural de tu realidad cotidiana pues los lazos de luz que nos unen no pueden estropearlos la materia ni la energía egoica la cual cede a la belleza y la fortaleza en la que se gesta el ser.

Tesoros de luz

En el juego escondemos tesoros de luz destinados a los niños, sin embargo, aquellos que no olvidan con el crecimiento desarrollan estos tesoros en forma de habilidades o capacidades espirituales que sirven para abrir el camino no sólo a sí mismos sino a los demás, cuando están preparados para ello.
Yo escondí tesoros de luz para ti y pronto recolectarás la siembra que promete ser próspera y abundante. Compañeros de camino te mostrarán el aliento sembrado en tu pecho que necesita algo tan simple como un soplido de magia para ser despertado y manifestado hasta el final de tus días en esta dimensión, la cual debes ver como una dimensión de luz, no de oscuridad.
Estos maestros de luz sí recuerdan la maestra que eres y van a aparecer de forma espontánea atraídos por tu estado de quietud y de vaciado mental en el espacio de silencio que abre tu nueva vibración. Elévala con el lenguaje de los símbolos y la meditación y lo que tenga que abrirse para transformarte, se mostrará ante ti con el poder que desarrollaste durante tantas existencias al servicio de tus congéneres. Sin prisa, la vida es.

Desde el reino de las ondas

Desde el reino de las ondas me dirijo a ti para hablarte de nuestra creación. Creamos movimiento de la nada, mediante la telepatía que mantenemos con las ondas que nos nutren. Para llegar a nuestra capacidad, hay que estar en paz y mantener un estado de sensatez y de contacto directo con el ser y con el origen que lo creó.

Durante varias civilizaziones en nuestro planeta líquido y de luz, convivimos con las ondas que nacen del espacio y nos acunan en la acústica suave desde que venimos aquí. Vemos las ondas y les pedimos que se transformen y viajen allá donde son requeridas. Las ondas pueden ayudarnos a predecir y a ser conscientes de varias dimensiones y de sus conflictos. Las ondas son conciliadoras y contribuyen a armonizar el entorno. Son moldeables y pueden viajar a miles de años luz y regresar para informarnos.

Las ondas nos completan y su energía es tan poderosa que incluso tienen el poder de despertar lo inimaginable.

Canalización desde el color


Estoy en contacto con el color y la estrategia soñadora de la estrella que nos ilumina la cual pretende irradiarnos rayos de sueño para atraparnos en la naturaleza onírica. Sólo los despiertos la esquivamos y conseguimos salir del sueño. El color irradia en nosotros y alumbra nuestra aura. Los despiertos la fortalecemos, pero los que están bajo la influencia de la estrella duermen sin saberlo pues el color les debilita la energía.

Esperamos a que por sí solos algún día esquiven la influencia de la estrella y entonces les ayudamos a mantenerse para siempre en el estado del despertar del ser. Para ello, la confianza es nuestra mayor aliada.

viernes, 10 de febrero de 2012

Confía en tu potencial

Llego a ti para decirte que confíes en tus potenciales pues estamos soplándote energía y ultimando circunstancias para que puedas llevarlas a cabo con cautela, prudencia, discreción y con el ánimo de ayudarte y de audar. El planeta te pide que medites sobre él y le lances renovación y fin de las quejas para elevarse en la calma del ser. El alma del planeta está gritando y llorando pero si le envías consuelo a través de los símbolos estarás brindándole un regalo de armonía y bendición que hará latir su corazón con más fuerza.

Sigue conversando con tu niña interior y deja que calle y llore, que hable y te confiese sus secretos y préstale toda tu atención pues durante años se la has negado. Ella ha sido paciente y ha sabido esperarte, ahora te toca a ti escucharla y hacer lo que te pide. Si llora, acéptalo y abrázala con el mismo cariño y devoción con el que abrazarías la magia de las hadas. Esa niña sabes que eres luz pero durante demasiado ha estado ocultándola, quizás ya la ha olvidado. Tráele al recuerdo lo hermoso que yace en su interior siguiendo la voz de tu intuición, esa que sembraste en otras vidas y que ahora va a rescatar lo mejor de ti y a rescatarla.

Abre tus experiencias al sol que brilla en tus entrañas y dótalas de luz. ¿Cómo? Subiendo el volumen de tu ser y despistando al ego. Últimamente te ataca con preocupaciones que no van proliferar, sino que sólo son pequeños toques para alterarte. Escucha música alegre o calmante y tu ego bailará contigo. Invítale entonces a colaborar con tu ser para formar el mejor de los equipos. Ese equipo para el que veniste aquí y que te permitirá tu ansiado regreso.

Mira como si quisieras mirár más allá, pero por curiosidad, por aventurarte en una nueva empresa, pero sin esperar nada en concreto, solo decide que te gusta y déjalo fluir, brindándole tu aliento luminoso pero sin condicionarlo con las etiquetas de la mente parlante. Sólo mira y deja que las circunstancias sean y que sea la vida quien tu mire a ti: a tu corazón de hada anhelante por descubrir los secretos de su magia. Y las circunstancias se transformarán a tu favor, como en ese cuento de hadas que escribiste hace tantas vidas...

Y la luz brillará allá donde pises, pero ahora envíala a La Tierra y fundíos en un mismo latido vibrante y poderoso. Si deseas trabajar más a fondo con el alma de La Tierra, pídeselo a ella, a tu madre y a cambio ella te traerá el recuerdo de La Diosa, esa diosa cuya alma conoce la melodía para el equilibrio del planeta.

jueves, 9 de febrero de 2012

Prosperidad Emocional



Penetro en el espacio donde te paras para darte cuenta de que estás aquí y captas las sensaciones, sientes más los sentidos y la intensidad del momento se vuelve presente. He intentado llegar a ti pero estabas dormida y absorbida por un mundo que te angustiaba pero esta sensación se volvió tan habitual en ti, que pasó a ser dominante en tus experiencias. Ahora suelta esa angustia, esa necesidad compulsiva de preocuparte y mantente quieta y hazte señora de la quietud. Fúndete con ella en un abrazo y besaos hasta la eternidad porque vas a convertirte en la emperatriz serena y armoniosa que el mundo necesita para llenarlo de magia y de energía hadada, de intuición y de fantasía que nos conducirá hacia sueños que van a venir aquí gracias a la confianza que vas a depositar en cada uno de los pasos que van a conducirte a tu destino luminoso, ése que has labrado y que empieza a despertar de la mano de tu paz.

Permite que tu energía se expanda y crea pensamientos dignos de monarcas con vocación de servicio. Recréate en tu Prosperidad Emocional y dála a conocer. Deja lo demás en manos de los demás y cruzarás fronteras inimaginables.


Siéntete libre, olvídate de las preocupaciones y empieza a trabajar en tu Prosperidad Emocional, en la abundancia en todos los aspectos positivos de tu vida. Abundancia en amor, en luz, en economía, en diversión, en creatividad, en seguridad, equilibrio, agradecimiento, bendición, milagro, amparo, solidaridad, apoyo, dones, habilidades, virtudes, discernimiento, sabiduría, alegría. Haz espacio para todo ello con la fuerza del pensamiento positivo y expándete. Empieza por ti y hazlo ahora.

Pídele ayuda a tu niña interior, pídele que salga y te sorprenderá su fuerza y el radio de acción infinito de su luz pura, esa luz que pasa a través de todo, que va más allá y que consigue llegar a donde se propone, esa luz que no se amedrenta y que destila el amor de los ángeles. Esa luz eres tú. Reconócelo de una vez por todas y vuela con ella.

miércoles, 8 de febrero de 2012

Reconoce el poder de tu luz


No te das cuenta pero generas una luz interior que bendice a quien la toca.

Cuando estés en cualquier lugar, visualiza que con tus manos o con el simple poder de la intención depositas la luz en todo lo que ves y con esa luz vas a alimentar el alma de todo lo que te rodea. Es un proceso sutil e invisible que contribuye a elevar todo lo que ante ti se manifiesta. No pidas pruebas, sólo confía.

Agradece cuanto te muestran tus ojos y el agradecimiento te conectará con la perfección con la que naciste. Provienes de la infinitud y de una fuente de amor infinita que está velando por ti. No llores, sonríe y tu sonrisa se transformará en un hada complaciente que te irá mostrando en cada paso del camino como poco a poco puedes ir sembrando en La Tierra tus habilidades y destrezas hasta ser capaz de manejar con sensatez tu cetro real.

Las hadas nacen en un reino sin condiciones y eso es ahora lo que debes intentar para ti. Es difícil pero exigirle al mundo o pedirle explicaciones no te va a llevar a reconocer tus dones, sino más bien a apagar su luz o a que alguien pretenda llevarte a su terreno, aunque no sea con mala intención. Aprende a reconocer al verdadero maestro. El mejor está en tu interior. Lo te hace sentir mal o te causa dudas, normalmente te aleja de él. Nosotros no pondríamos en peligro tu integridad sólo te pediríamos algo que te sorprendiera o perturbara, cuando tratáramos de que vencieras algún miedo o algún rasgo en el que debas evolucionar en el ahora y tu actitud pretendiera resistirse al cambio.

Tu ser te sopla respuestas y desde la armonía conseguirás descifrarlas. Ve despacio y llénate de la paz de los entornos naturales que te ayudan a conectar con el ser de forma natural y espontánea.

En tu interior está el potencial ahora durmiente. Despertará en su momento. Escucha la voz de tu interior, la que te anima a profundizar en tu silencio. El silencio nace de la escucha interior, libre de pensamientos egoicos.

Despójate de ellos y dale cabida en tu vida a la voz sintiente del ser, esa parte de ti que te ama y a quien a veces das la espalda. Pero ella te espera pacientemente para desvelarte los secretos de tu sabiduría, cuando estés preparada y receptiva. Invítala a pasar sobre tu puente de quietud, cuando lo hayas construido.

Mientras tanto, reserva tiempo para tu tranquilidad y bríndate tiempo para escucharte.

Para N.

martes, 7 de febrero de 2012

Quietud, meditación, sentir y agradecer

Tus guías sufrimos por verte así. Eres una reina del Universo que ha perdido la conciencia y debes darte la oportunidad de atreverte a dar un paso más pero para ello debes tener la paciencia y la confianza de saber esperar y de seguir dando paso a la vida. Encontrar tu punto de paz y de anclaje en el ahora te ayudaría enormemente pero para ello debes disciplinar y dominar tus emociones. Hay tristeza en tu interior, debes aceptarla como parte del proceso y sacarla con dulzura. Desgraciadamente, en La Tierra a veces las lecciones vienen acompañadas de lágrimas, dudas o inseguridad. Pero hay que aprender a experimentar y sentir los extremos de la balanza y abrirse al poder de una mente neutral que nos enseñe a mirar al dolor a los ojos sin dejar que nos absorba y nos engulla hacia las profundidades de lo negativo y lo oscuro.

La desesperación y la incertidumbre son armas que pueden convertirse en aliadas de la impaciencia y doblegarnos en dar la espalda a los procesos necesarios para evolucionar, pulir nuestras debilidades y alimentar nuestra espiritualidad. El juicio nos arrastra hacia el pasado, el presente o el futuro, frecuentemente, para concentrarnos en lo que no gusta y maldecir la vida.

Procurar ser suaves con las palabras es un primer paso para no darle tanta cancha a la mente crítica.

Sentir y agradecer son las herramientas que nos conectan con el ahora. El agradecimiento te adentra en la belleza de tu ser. Respecto a sentir, puedes sentir la ropa en tu cuerpo, sentir la brisa, el frío, cada paso que damos, escuchar atentamente y conscientemente el sonido de la respiración, pararnos a sentir el tacto de lo que tocamos, nos invita a sentir la vida sin tantas prisas ni exigencias. Detenerse en el camino para tomar de la mano a la quietud interior que clarificará nuestras decisiones, es un paso propio de sabios. Nunca se sabe cuánto tardaremos en alinearnos con nuestra paz de espíritu pero aceptar que no siempre sabemos, con la confianza de que sabremos, cuando llegue el momento, es apostar por la confianza, la seguridad y el discernimiento, el cual ejecutaremos desde la calma con la seguridad de un sabio que habla poco pero que ha aprendido a manejarse con la vida, a escucharse a sí mismo y a reconocer y vivir su verdad. No hacer nada puede ser el paso previo a sacar lo mejor de nosotros. Así es la paradoja de la vida. Esperar con desapego.

Espera a que la luz aflore, comprometiéndote a adquirir un estado mental de tanta paz que haga reír al ego. Al ego debemos verlo como un maestro burlón del que podemos reírnos en silencio pero invitándolo a que forme parte del presente, del instante, único momento en el que vamos a mirarlo, eso sí, adiestrándolo a través del adiestramiento de nuestros pensamientos para que no se mueva tanto, ni quiera buscar tanto fuera ni se inquiete, sino más bien que aprenda a dejarse llevar, a fluir, a ser y a dejar ser. No le hace falta moverse tanto pues las cosas son por sí mismas y vienen por sí mismas y forzar o aferrarse a las cosas nos aparta de la esencia verdadera, de lo genuino, de la magia que se manifiesta por sí misma y que no necesita para ser de una respuesta externa, de una actitud o de un comentario, sino que vive por sí misma y crea circunstancias, personas y experiencias en las que manifestarse y reflejarse en el ser que somos. En cada una de estas experiencias está imprimida nuestra luz y nuestro sosiego.

No forzar, desapegarse, dejar de esperar o de condicionar, aceptar la incertidumbre, no desesperar, sino aceptar el curso de las cosas, de los procesos y de los acontecimientos, hará que el ser vaya haciéndose espacio y el ego se vaya remilgando, arrinconando o colaborando.

Conciliarse con uno mismo y perdonarnos y perdonar a los demás, aunque sólo sea, interiormente y experimentar un sentimiento de descarga por del daño sufrido, sintiéndonos libres ahora por lo que fue o lo que pudo pasar es un pasaje a la libertad de ser.

Permítete ser.

El ser atrae por sí mismo a lo necesario para florecer pero no tiene prisas porque crece en el momento adecuado, después de haber depositado con paciencia su semilla en nosotros para expresarse completamente cuando le corresponda. Enfadarnos con el ahora, es contrario a la aceptación, a decir sí a las circunstancias del instante (aunque no me gusten). De hecho, la aceptación no tiene que ver con sí o no, sino con mirar a lo que es tal como es, sin juicios. Es el ego el que reviste cada momento enjuiciándolo anclado en el enfado, en el miedo o en la falta de control. Pero controlar nos aleja del ahora, soltarlo y aventurarse a dejar que se manifieste según le plazca puede llegar a sorprendernos. Si las oportunidades se presentan (especialmente cuando no hemos ido a buscarlas), debemos aprovecharlas. En lo inesperado, radica una magia que supera a la de las hadas.

La meditación puede ayudarte a no dejarte condicionar por lo que no te conviene ni te nutre, a extraer lo positivo, a elevar tu vibración, a clarificar tu mente, a discernir y a saber reconocer palabras sabias o necias, a fundirte con la armonía del ser y a mantenerla como un estado natural en ti que te dará la fuerza para seguir a pesar de todo -esa fortaleza y ese coraje que sólo poseen los valientes y los líderes-, a redescubrir tu luz y a llevar a cabo tu misión aquí y ahora en toda su amplitud y grandeza.

Toma tu cetro, reina, y tómalo desde la serenidad del corazón. En el paso del tiempo está la llave de acceso al reino en el que habrás aprendido a usar adecuadamente tu cetro: el reino del aquí y del ahora.

Para N

El baile de la vida

Carmen,

Continúa con esta actitud de quietud y de abrirte a los impulsos del momento. Pero son impulsos del corazón, no son impulsos del ego, sino pequeños pasos que te conducen a la elevación espiritual. La dulzura de los momentos será la nota predominante. Recortes la tranquilidad que has ido sembrando con tu esfuerzo, pero ha sido un esfuerzo calculado, pausado, que, en general, no ha sido fruto de la obsesión ni la competitividad o una elevada autoexigencia. Siempre has tenido una relación positiva con el dinero, has sabido distribuir el de los tuyos y el de los demás. Has estado y eres una buena gestora no sólo con el dinero, sino también con las emociones.

Ahora experimentas un baile con la vida, es un baile del que disfrutas cada paso ya un ritmo pausado, suave, elegante como un vals que te acaricia el alma, como un vals que bailas con nosotros, tus guías.

Si has experimentado lecciones duras, te pedimos que no nos guardes rencor. Hemos hecho lo posible para protegerte pero, a veces, las lágrimas y el sacrificio son una vía más para aprender a La Tierra. Estas herramientas te han hecho fuerte y sabia y luego esta fortaleza y sabiduría, la has podido compartir con los tuyos por ayudarles.

Gracias por continuar con tus prácticas energéticas, aunque sólo sea en la intimidad de momentos de recogimiento, recibimos el calor de tu energía y el amor que se desprende de tu alma cuando logras un estado mental relajado y calmado, producto de la concentración de tu mente durante la circulación al nivel máximo de la energía.

El silencio es aquel compañero, Carmen, que te coge de la mano y que has sabido conquistar durante tu trayectoria. La mente ya no te domina tanto y, por ello, tu vibración es elevada. Además, contribuyes a elevar la vibración de los que te rodean y, en general, la vibración del ambiente de donde estás. Cuando haces juicios, son juicios hechos con sensatez y desde la paz mental. Has alcanzado un buen estado mental y, a veces, sin darte cuenta con tus palabras bendices, porque son palabras sinceras, luminosas, que nacen del amor por ti misma y del amor a la vida. Las pronuncias de una manera que demuestras que amas la vida y que tu experiencia en el planeta Tierra ha sido vivida conscientemente y aceptada.

Si tienes ganas de dormir, duerme y levántate más tarde. Te lo has ganado. Cuando camines, camina sintiendo cada paso, oliendo, escuchando el sonido de la respiración, los sonidos del exterior. Aprovecha para sentir la vida más intensamente, desde las cosas pequeñas. Venimos a sentir, si no sentimos, la vida se nos escapa. , sé consciente del instante, de su paso efímero, de la transitoriedad de las cosas, de lo que tenemos que mirar y lo que debemos dejar pasar, que nos atraviese, dejar que las cosas que no nos aportan ni nos convienen pasen de largo, es muestra de despega, de no dejarnos afectar ni condicionar por elementos que podrían alterar nuestra paz. Es un juego que se presenta de formas inesperadas, particulares, pero es un juego gracias al cual aprendemos a discernir ya tomar decisiones. Podemos acertar o equivocarnos pero desde el momento en que nos damos cuenta de que nos hemos equivocado, ya hemos aprendido la lección.

Para Carmen

Canalización sobre el ahora


Pretendo que te ancles en la fuerza absoluta del momento presente y que te imbuyas en el estado del no juicio para que conectes con esa vibración de bendición que se crea por el mero hecho de estar aquí.

En la neutralidad reside una paz indescriptible que atraviesa el ego para recordarle que soltar el control, dejando incluso de juzgar, es el mejor modo de entregarse al momento, efímero, mutante y fugaz en sí mismo. Por tanto, ¿para qué molestarnos en enjuiciar ese momento que va a seguir siendo como es, independientemente de nuestras valoraciones? Es una forma inconsciente de perder el tiempo. Permitamos, que el ruido nos eleve al ahora, aceptándolo pero sin permitir que nos atrape. Para ello, sabemos que existe un silencio interior que se conquista, cuando acallamos nuestros pensamientos.

En mi dimensión ya lo hemos comprendido desde hace tiempo. Por eso, nacemos con la paz y la meditación se convierte en nuestra hermana desde que abrimos los ojos. Esos ojos achatados y grandes la realidad que avistan se siente desde el sentir y el latido del ser. Son ojos que ven desde el ser no desde el ego, al cual ya aprendimos a despistar. Decir sí al momento, al instante, a lo que es, es la mejor herramienta para hacer que el ego se desoriente pues la aceptación se convierte en su debilidad y en nuestra fortaleza. Di sí, pero sin emitir juicios y, si los emites, en positivo para potenciar la vibración de milagro que alberga una aura limpia y hermosa. Con esa aura de energía nacemos pero tenemos la posibilidad de modificarla con el poder de la palabra y del pensamiento.

Cuando nos acercamos a ese silencio, nuestra visión se amplia pues la visión del ser es amplia, a diferencia del campo de visión estrecho del ego que nos esclaviza y nos obliga a limitarnos.

Rendirnos es consecuencia de aceptar y, además, el regalo de la rendición es que nos abre al cambio y a la luz interior. Sin embargo, rendición no debe confundirse con sumisión o miedo a los que nos tiranizan. Aprender a decir no con una sonrisa en los labios es el primer paso. No debemos odiar ni enjuiciar a los que no lo respeten, pero sí mantenernos firmes en nuestra actitud. Sin embargo, si las circunstancias nos lo imponen y peligramos, aceptaremos esa situación pero esperando con paciencia a que se den las circunstancias para poder expresarnos con libertad. Mientras tanto, nos habremos sincerado con nuestro corazón, y continuaremos diciendo no interiormente aunque el no exterior no haya sido aceptado ni respaldado. Eso, hasta que la oportunidad en el exterior aparezca, si no aparece nunca, podremos plantearnos qué nos enseña esa situación: quizás aquél no es nuestro lugar. Sin embargo, no debemos depender de la aceptación de los demás, sino de la propia aceptación y reconocimiento y tratar de ser consecuentes y coherentes con nuestra forma de actuar y de pensar. A veces, pretender que siempre los demás hagan lo que creemos es ser tan tiranos como aquellos que nos tiranizan, eso sí, una actuación ajena nunca es válida si atenta contra nuestra dignidad, autoestima o nos hace sentir mal.

Si aceptando una situación, no conseguimos hacer callar el pensamiento, y, por tanto, no podemos conectar con el silencio interior, entonces, haremos lo que esté a nuestro abasto para adoptar otra actitud que nos haga sentir bien, independientemente de lo que piensen los demás y sin perjudicar. Esta actitud provendrá del corazón y no ha de ser maliciosa. Esta es una forma de hacer callar al parloteo del pensamiento, ese que nos provoca ruido mental e interfiere en nuestras vidas, dándole espacio a la voz parlanchina del ego. Eso hará que nuestra vibración suba y vaya apartando o rechazando las vibraciones más bajas de los demás, incluso, de las de aquello o aquellos que nos estorban, molestan o incordian.