Hallar bendición allí donde según la etiqueta del no juicio, confiere una fuerza especial a la bendición en sí misma que será más potente en su manifestación y nos ayudará a encontrar la dualidad en todo lo que ven nuestros ojos, es decir, donde hay mal también hay bien y donde hay bien también puede haber dolor, en este último caso, si no se sabe gestionar con equilibrio emocional. Por tanto, los ojos de los que saben obrar sin juicio saben conectar con una realidad más amplia que el milagro está presente en cada minuto del día. Un pequeño milagro transforma la realidad cotidiana para elevarla a la vibración de la alegría. Encontrar ligereza en lo que los demás perciben como una carga y sentir latidos de agradecimiento allí donde los demás no saben reconocer el valor de la luz que los envuelve confiere a nuestra vibración energética una vibración de mayor elevación espiritual. La elevación espiritual no tiene necesariamente que estar condicionada o trabajada con una técnica ya que no sirve de nada llevar a cabo ejercicios expirituales interiores, si éstos no van acompañados de una actitud de alma, es decir, una actitud de muestra genuina, inaudita y auténtica de la expresión del poder del alma, todo lo que queda fuera de esta expresión resulta una expresión egoica. Sin embargo, si los ejercicios van acompañados de una nueva actitud de honestidad en el sentir, entonces estarás desarrollando tu misión en armonía, te liberarás de la rueda de karma y estarás preparada para evolucionar hacia nuevas dimensiones de luz en no ser que elijas seguir en misión voluntaria aquí.
En equilibrio emocional, Carmen, es posible aceptar y conciliarte con la dualidad, desarrollando una actitud de no juicio y de coherencia entre lo que se siente y lo que expresa.
Cuando hagas algo en concreto porque alguien te lo impone o te lo venden como un método perfecto, nosotros, los guías, nos entristecemos porque no hacéis lo que sentís sino lo que un ego quiere que haga para llevaros a su terreno . Y venís aquí a sentir por vosotros mismos no a hacer ni a sentir lo que los demás quieren que hagas. Marcar distancia prudencial o indefinida o decir no amablemente es una opción válida, si así te lo dicta el corazón.
Continúa, Carmen, sintiendo la vida poco a poco, en contacto íntimo con la energía.
Resuelve el día a día y el mañana se desplegará como un arco iris con el esplendor de la luz de la belleza que deja que la toque y la vean sólo las almas preparadas para ver con los ojos del no juicio, de la neutralidad de una mente disciplinada y en calma.
Continúa en paz contigo misma, Carmen, y da paso más que nunca a la espontaneidad y la expresión natural del momento. Así, tus momentos se vuelven más creativos y en perfecta sintonía con el tiempo. El tiempo, cuando la persona está en línea con su misión, no es un obstáculo, sino un fiel aliado que dulce y mansamente se pone a tus pies para caminar juntos.
Caminad, Carmen, y recuerda que la vida te hace un regalo que tú escogiste: vivir en la misma vibración del latido de tu corazón, meciéndote en el calor y la sabiduría de la luz del alma. El alma sabe lo que te conviene, cuando le das su combustible: la aceptación, el no apego, la paciencia y la confianza en que, nosotros, los guías, te llevaremos donde te mereces, pero, mientras tanto, sigue disfrutando de la belleza de cada paso de tu camino de luz.
Para Carmen
En equilibrio emocional, Carmen, es posible aceptar y conciliarte con la dualidad, desarrollando una actitud de no juicio y de coherencia entre lo que se siente y lo que expresa.
Cuando hagas algo en concreto porque alguien te lo impone o te lo venden como un método perfecto, nosotros, los guías, nos entristecemos porque no hacéis lo que sentís sino lo que un ego quiere que haga para llevaros a su terreno . Y venís aquí a sentir por vosotros mismos no a hacer ni a sentir lo que los demás quieren que hagas. Marcar distancia prudencial o indefinida o decir no amablemente es una opción válida, si así te lo dicta el corazón.
Continúa, Carmen, sintiendo la vida poco a poco, en contacto íntimo con la energía.
Resuelve el día a día y el mañana se desplegará como un arco iris con el esplendor de la luz de la belleza que deja que la toque y la vean sólo las almas preparadas para ver con los ojos del no juicio, de la neutralidad de una mente disciplinada y en calma.
Continúa en paz contigo misma, Carmen, y da paso más que nunca a la espontaneidad y la expresión natural del momento. Así, tus momentos se vuelven más creativos y en perfecta sintonía con el tiempo. El tiempo, cuando la persona está en línea con su misión, no es un obstáculo, sino un fiel aliado que dulce y mansamente se pone a tus pies para caminar juntos.
Caminad, Carmen, y recuerda que la vida te hace un regalo que tú escogiste: vivir en la misma vibración del latido de tu corazón, meciéndote en el calor y la sabiduría de la luz del alma. El alma sabe lo que te conviene, cuando le das su combustible: la aceptación, el no apego, la paciencia y la confianza en que, nosotros, los guías, te llevaremos donde te mereces, pero, mientras tanto, sigue disfrutando de la belleza de cada paso de tu camino de luz.
Para Carmen
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