Sabemos que tienes dudas respecto a nuestras predicciones pero tu vida irá amansándose, incluyéndolas a todas. El tiempo en soledad te ha sido concedido gracias al buen uso que haces de él en beneficio de todos y porque esta función forma parte de tu misión de vida.
Por esta razón, te hemos aprovisionado de tu merecido tiempo libre para que lo destines a canalizar esas palabras que, como susurros, se cuelan en la ventana de tu alma desde niña.
Mira lo que te aporte serenidad y asombro y descarta el resto. El mundo está lleno de gente necesitada de cariño y atención, dispuestos a absorberlo a cualquier precio y a toda costa, pero poseen un falso orgullo y ocultan sus sentimientos respecto a esta carencia emocional relevante no sólo a los demás, sino a sí mismos.
No te sientas mal ni desperdicies tu tiempo, mirando como te miran. Tampoco lo mancilles criticándolos o prestándoles atención. No te sientas mal, si te miran demasiado: es que tienen poco que mirar en sí mismos. Eso te alienta a seguir descubriendo y desarrollando tus tesoros interiores cuya puesta en marcha te llevará al pleno desarrollo de tu potencial.
Sigue mirando hacia dentro y recibiendo lecciones magistrales de seres de otros reinos que viven en la Tierra y aportándoles tu tiempo, tus detalles, tus gestos desinterados y tus ofrendas. Créenos, la vida te recompensará con creces. Sabemos que lo haces de corazón, sin buscar nada a cambio, sólo por el placer de hacerlo y por la paz de espíritu que sientes al entrar en contacto con ellos. Pero la gratitud de estos seres pequeños te revestirá de amor, un amor sin condiciones cuyo lenguaje estás destinada a recordar, a reaprender y difundir a quienes estén preparados para acogerlo en su corazón. Hay que ser conscientes y respetar el ritmo de evolución de cada cual para no malbaratar el nuestro con quien no lo merece, ni forzarlos ni perjudicarlos, tratando de convencerles o ayudarles. Por eso muchos sabios no puedieron transmitir su maestría ni su mensaje presencialmente pero pudieron seguir encontrando tesoros y joyas que latían en su interior para irradiarlos en cada sonrisa e incluso imprimirlos en palabras transcritas, libres de llegar dondequiera que sea.
No te sobrecargues y céntrate en cada pequeño paso, dedícale toda tu atención y el Universo te marcará nuevas tareas, más elevadas, a las cuales mirarás desde el brillo cristalino de tu alma dulce.
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